Cuidado con el pasado


No intentes tumbar la puerta que ya se cerró:
podrás encontrar polvo y piezas oxidadas,
antiguas máscaras
y algún remordimiento tan pesado como el tiempo perdido;
te escupirán la cara, quedarás ciego…
Mirar para atrás no es algo que se hace sin pensar:
hay que haber tomado distancia primero,
o beberás de la vieja sangre de las heridas profundas acumulada en la antesala…
Sigue tu camino, oh hombre atento,
con el sentido y la intuición del filósofo y del científico
que es hora de marchar.
Algunas esperanzas se vuelan como el polvo
en las calles de tierra de mi barrio.


Del poemario: "Angustia, desidia y soledad".

Agustín R. Iribarne

Comentarios