Oda a la Poesía

 

Oda a la Poesía


Poesía es conjuro:

oráculo sagrado

que me lleva al otro lado

de las cosas y los seres

de dolores y placeres.

 

Poesía: crisol donde machacar

el poema, hierba primaria,

junto a la experiencia y a la presencia,

atávicos brebajes macerados,

hasta que broten alquímicos versos.

 

Poesía es primacía de palabras

sobre el reinante silencio del Universo.

 

Poesía es el segundo

en que me detengo a observar

con ojos de niño curioso

 

poesía es el pozo

que me hunde

a la profundidad de la tierra

-a veces me caigo

                                                                                           otras, me tiro-             

 y poesía es la soga que me saca.


Poesía es la hamaca

que se balancea

en la plaza de juegos

que es mi vida…

 

Poesía: trance incontenible de esencias…

Poesía: desfile de sublimaciones.

Poesía es encontrarte en cada palabra

que rime o no con tu nombre

-pues todo conjuga con tu mirada-

con tus perfectos ojos verdes

que derrochan versos a mi baúl

donde guardo todos los papeles

que te nombran o evocan…

 

Poesía es susurrarte

palabras que te tocan…

 

Poesía es ese instante

que asciende a lo eterno…

 

Poesía es un mensaje que desciende

como por arte de canalización.


Poesía es pura inspiración.

 

Y allí se corona de laureles,

en el pedestal del lenguaje…

Por todo eso, y también

por lo que no expreso,

a ti poesía, te amo.

 

Te amo por lo que eres

y también por lo que no eres,

te amo por lo que dices

y también por lo que callas,

por lo que haces evidente,

por lo que ocultas fervientemente…

 

Te amo por tu confusión

y por tu claridad

te amo por tu mentira

y por tu verdad

 

por tu multiplicidad

y por tu unidad

 

por tu aceptación e integración

de cualquier acontecimiento…

 

Por tu dulce corazón

o tu elevada razón

para expresar algo

ya sea interior o exterior…

Porque pides poco

(un lápiz, un papel

un paisaje, un suceso

una mente, una voz)

pero mucho das

(trance, comprensión,

aprendizaje, visión,

eternidad de lo fugaz).

 

Pides poco, pero mucho das

como una amante perfecta.

 

En tus brazos aéreos

se me vuelan las horas

y mi alma se hace etérea.

 

Contigo quiero jugar

hasta que el tiempo me lleve

a un nuevo lugar…

 

Si allí consigo hablar

te evocaré como un juglar:

mi meta siempre ha sido ser poeta

y nombrarte con todas las letras:

poesía, de la a hasta la z

voy buscando tus esencias.


Agustín R. Iribarne



Comentarios

  1. Estupendo blog, todo el trabajo desplegado.
    Saludos
    Dejo mi blog por acá
    https://williamkeithsutherland-poesia.blogspot.com

    ResponderEliminar

Publicar un comentario